lunes, 22 de julio de 2013

GRUPO DEL MES: B.A.P.

¡Hola, fanáticos del K-pop! Hoy llega la sección relacionada al grupo coreano del mes que irá dirigida a B.A.P en esta ocasión. Este grupo formado por seis miembros publicó su nuevo single “Hurricane” el 17 de julio y debido a ello decidí dedicarles esta entrada a ellos. He llegado a considerar a B.A.P como una de mis bandas preferidas, ya que la letra de sus canciones tiene un significado muy interesante que nos hace discurrir a todos aquellos que las hemos escuchado, como es el caso de “Power”, en la cual se critica de manera explícita la sociedad actual y el poder que tiene el dinero en ella, además de otros elementos. Es un deleite escuchar sus canciones al igual que verlos a ellos. ¡Espero que os guste!











Pre Debut
El 19 de diciembre, TS Entertainment anunció que su grupo se llamará "B.A.P" (Best/El mejor, Absolute/Absoluto, Perfect/Perfecto). Se declaró: "El grupo se compone de seis miembros, como se puede ver, por Bang YongGuk, Zelo, y Himchan; el resto de los miembros son igual de talentosos. Bang Yong Guk está promoviendo con Zelo como un grupo de unidades, mientras que Himchan acoge SBS de MTV The Show". Representantes continuaron, "B.A.P. es el proyecto más ambicioso de TS Entertainment. Todavía tenemos muchos proyectos más sorprendentes para dar a conocer al público".
El 27 de Enero del 2012 fue su debut en un showcase a gran escala, el cual atrajo alrededor de 3.000 fans. En el programa de televisión de MTV: "Ta-Dah!: It's B.A.P", se reveló a los tres miembros restantes: Jung DaeHyun, Moon JongUp y Yoo YoungJae.
Debut
Se lanzó el MV del grupo el 26 de Enero de 2012. Y su debut oficial fue en el programa de música "Music Bank", el 27 de Enero, y después en los restantes programas: "Music Core" e "Inkigayo".
Su debut fue considerado uno de los mejores de 2012.
Los componentes que integran esta fabulosa banda:
YONGGUK (Líder, Rapero y Bailarín).

HIMCHAN (Vocalista, Rapero y Bailarín).
http://es.drama.wikia.com/wiki/Kim_Him_Chan





DAEHYUN (Vocalista y Bailarín).







YOUNGJAE (Vocalista y Bailarín).








JONGUP (Vocalista, Rapero y Bailarín).







ZELO (Maknae, Rapero, Vocalista y Bailarín).







Y para terminar, algunos videoclips de ellos.




















domingo, 21 de julio de 2013

DRAMA COREANO DEL MES: LOVE RIDES THE RAIN.

¡Saludos, queridos lectores! Antes de dar inicio a esta nueva entrada, debo informaros que en agosto estaré ocupada por numerosas razones, una de ellas es que tengo previsto un viaje a China junto a mi madre… En resumen, que no actualizaré ni subiré nada a lo largo de ese mes en un principio. Sin embargo, iré preparando entradas y proseguiré con la elaboración del fanfic. Gracias por vuestra paciencia y perdón por el retraso. Hoy, os voy a presentar un drama coreano que vi hace dos meses aproximadamente. El drama que os voy a recomendar se titula “Love Rides the Rain”. Os facilito el link para que indaguéis y conozcáis a los personajes y los actores que los interpretan: 

SIPNOPSIS
Ocupa de la esencia del amor más allá de la generación, con el amor puro de los años 70 y el amor moderno en la sociedad actual. Seo In Ha un estudiante de bellas artes que dedica su amor a una sola mujer Kim Yoon Hee de una belleza tímida, elegante. Se conocieron y se enamoraron uno del otro durante sus estudios universitarios en la década de los '70, pero lamentablemente su amor no estaba destinado a ser. Ahora en el presente siglo XXI, el hijo de Seo In Ha, un orgulloso y arrogante fotógrafo de nombre Seo Joon conoce a Ha Na (hija de Yoon Hee), una chica alegre y enérgica que estudia jardinería. Ellos chocaron accidentalmente en una estación de tren, razón por la cual Ha Na pierde su celular y este termina en manos de Seo Joon, situación que los llevará a conocerse. Pero ¿Sufrirá su amor el mismo destino que el de sus padres? ¿Dejarán sus padres quedarse juntos?. Ha Na Y Seo Joon establecerán un romance que para Ha Na sera muy especial ya que para ella será su primer amor, su primer beso y la primera persona que le haya dicho que le gusta, pero debido a que la madre (Kim Yoon Hee) de Ha Na  es la causante de que el padre (In Ha) de Seo Joon deje a su mamá, Seo Joon no podrá soportar ver derrumbarse a su mamá y el tendrá que decidir entre lo que siente por Ha Na o dejarla para no hacer sufrir a su madre. Un drama increíble el cual no podrían dejar de ver.















CURIOSIDADES
Tiffany de Girls' Generation grabó una canción para el OST del drama llamada “Because It's you”.
 En el capítulo 12 Jeon Sul toca basked case de Green Day.
Antes Love Rain iba a tener 24 capítulos pero los capítulos del pasado los acortaron.
Jang Geun Suk tuvo un accidente en el rodaje de Love Rain.



















A pesar de que ya lo conocía nunca tuve la oportunidad de verlo, ya bien porque no me terminaba de convencer o porque el argumento no era de mi agrado. Verdaderamente nunca supe la razón, pero un día me dije a mí misma que al menos tenía que probar a ver un episodio e inmediatamente me enamoré de los personajes y de la trama. Por ello, os invito a echarle un vistazo. Seguro que no os arrepentiréis de ello. Y para concluir, la puntuación para este drama es un nueve sobre diez. Los actores son fantásticos y vais a poder apreciar la calidad del drama desde el primer momento. Es un drama, en el que abundan los sentimientos de los protagonistas y su dolor ante la imposibilidad de estar juntos. Y esto es todo por hoy. ¡Hasta la próxima!

sábado, 20 de julio de 2013

FANFIC COREANO: SUEÑO INALCANZABLE XIII.

Nuevo capítulo de “Sueño inalcanzable”. Espero que os guste. ¡Saludos!

CAPÍTULO 13
“ –Bien comencemos. Tomen posiciones. ¿Están listos? Tres, dos, uno… ¡acción!
El encargado de cámara comenzó a grabar la escena. Los miembros de INFINITE desempeñaron sus papeles conforme el guion lo indicaba, por lo que la filmación fue todo un éxito. Aproximadamente les tomó dos horas rodarla cuando los integrantes del grupo pudieron hacer un breve descanso. Cada uno de ellos se fue acomodando en una de las sillas que el staff del anuncio les había proveído alrededor de una amplia mesa de color roble, en la que habían depositado todas sus pertenencias  mientras habían estado ocupados rodando el anuncio. El líder y Woohyun cogieron sus teléfonos móviles; Sungyeol, Sungjong y Myungsol se dedicaron a conversar sobre  las conferencias a las que debían acudir la próxima semana; y finalmente Hoya y Dongwoo se mantuvieron quietos observando a los demás. Los jóvenes estaban exhaustos. Había sido una semana muy ajetreada en la que apenas habían tenido tiempo para tomar un respiro. El manager se acercó a ellos llevando consigo varios refrescos. Entregó uno a cada integrante y se sentó junto Woohyun.
-  ¿Ha sucedido algo? – preguntó Eun Sok con preocupación. Woohyun alzó la mirada y miró a su manager con un gesto de indiferencia, seguidamente apartó la vista y se concentró de nuevo en su móvil. Había advertido la perspicacia de su manager, quien sospechaba que él y Dongwoo habían peleado, así que tomó la decisión de evitar el tema y fingió no saber nada al respecto.
- Hyung, te has dejado la cartera.- Dongwoo, quien se encontraba al otro lado de la enorme mesa, recogió el billetero de su manager con el fin de entregárselo a éste. Mientras sostenía el pequeño objeto en su mano derecha, algo fino y pequeño se deslizó desde el interior y cayó al suelo planeando como si de un avión se tratara. El joven se agachó y agarró la fotografía. Pasaron unos breves segundos y Dongwoo seguía observando la pequeña imagen con expectación e inquietud. Sus ojos se movían rápidamente de un lado al otro de la foto como si intentara descifrar algún tipo de código oculto. Repentinamente sus rasgos faciales se tensaron y se le hizo un nudo en la garganta. Tragó saliva con dificultad y se dirigió hacia la silla de Eun Sok con expresión seria y desafiante. Frenó en seco y miró a los ojos a Eun Sok. De esta manera, el ambiente se transformó en un campo de minas, cualquier movimiento erróneo, cualquier comentario inapropiado podría desencadenar una batalla definitiva. Todos los presentes guardaron silencio. Nadie comprendía aquel cambio drástico de comportamiento en Dongwoo. Woohyun, el más próximo a Eun Sok, cogió la cartera que tenía Dongwoo en la mano y la abrió. El objeto reveló algo que provocó asombro en el joven.
- Hyung… ¿esto qué es?- formuló el joven mientras miraba de soslayo a Eun Sok.
- Mi nuevo huésped. Aquella chica que vino de intercambio hace unas semanas. Juro que os lo conté, ¿no recordáis?- nada más pronunciar esas palabras, todos los integrantes del grupo se agolparon apresuradamente alrededor de él para ver a la joven.
- Así que esta es la chica que te tiene encandilado…- musitó Sungyeol. Su comentario generó risitas entre los componentes del grupo, salvo en Woohyun y Dongwoo que permanecían absortos y afligidos. Todos aquellos murmullos y cuchicheos  hicieron enrojecer a Eun Sok, que intentaba negar lo contrario. Tras una breve pausa, Hoya, uno de los raperos y también el mejor bailarín de la banda, se quedó en ademán reflexivo analizando la imagen detalle a detalle. Intercambió miradas con Sungyeol y llegó a la siguiente conclusión:
- Presiento que ya he visto a esta chica en algún sitio…- todos se giraron extrañados hacia él. Seguidamente Sungyeol asintió con la cabeza a favor de Hoya.- Su cara se me hace familiar… pero no consigo recordar dónde pude haberla visto…
- Posiblemente en el concierto de la semana pasada.- Eun Sok volvió a introducir la imagen en uno de los compartimentos del billetero, pero esta vez se aseguró de que no volviese a caer del interior, pues temía perder el único recuerdo preciado que tenía hasta el momento junto a Helena.- Fue a acompañar  a una amiga. Tal vez la visteis en la sala de autógrafos.
- No estoy seguro. No vimos a muchas extranjeras ese día… - espetó Hoya sin apartar la mirada de la imagen.
- ¡Oh, yo sé quién es! – Intervino Sungjong con voz efusiva al mismo tiempo que señalaba la foto de la joven con el dedo índice.-  Ella, ella, ella… ¡ella besó a Woohyun! Aquello causó gran impacto… ¿no os acordáis?

Automáticamente, Sunggyu golpeó a Sungjong en el hombro y le mandó guardar silencio. Sungjong se mordió el labio inferior avergonzado por lo que acaba de hacer y después miró de reojo a Eun Sok esperando una reacción de asombro. Sin embargo, la respuesta de Eun Sok fue totalmente contraria. Su semblante se mostró más relajado de lo habitual e incluso exhibió una leve sonrisa que desconcertó a todos los chicos de INFINITE, fundamentalmente a Dongwoo. ¿Aquello marcaba el inicio de un futuro enfrentamiento?”
[…]
Abrí con dificultad los ojos; apoyé mis dedos en la sien y acto seguido masajeé mi cabeza lentamente. Fruncí el ceño… ¿cómo es posible que me duela de esta manera la cabeza? ¿Tal vez sean migrañas? Debería acudir a un especialista, no sé. Me incorporé y contemplé a través de la ventana la penetrante luz solar que inundaba la habitación. De repente, noté un frío extremo alrededor de mí. Mi cuerpo se había paralizado de tal forma que me era casi imposible mover mis rasgos faciales adecuadamente. En aquel momento, deduje que todo aquello era a causa del sobreesfuerzo al que había estado sometido mi organismo la última semana, en la cual había dedicado todo mi tiempo a estudiar coreano. Tenía que salir al exterior y desconectar un rato, por lo que decidí llamar a Kang Sang Ra con el objetivo de escapar de aquellas cuatro paredes que se habían convertido en mi prisión particular durante la última semana. Terminada la llamada, bajé al piso inferior.       Omma se encontraba en la cocina preparando el desayuno, el señor Choi estaba en el salón leyendo el periódico al mismo tiempo que degustaba el café recién hecho que tomaba todas las mañanas y Eun Sok… ¿Eun Sok dónde estaba? Lo busqué desesperadamente con la mirada, pero no había rastro de él. A continuación, fijé la vista en el reloj del salón: las 9:30. Qué extraño…
- ¿Ocurre algo, Helena?- preguntó Omma alarmada. Tras ello, dirigió su mirada hacia el reloj, del cual, yo, no había apartado la vista todavía. Hizo un gesto de confusión y se aproximó hasta mí. Me agarró suavemente la mano y la acarició. Acto seguido, se sitúo en frente de mí y empezó a examinarme detenidamente.- No tienes buena cara. ¿Has dormido bien? ¿Quieres que llame al doctor para que te revise?
Negué con la cabeza afirmando mi buen estado de salud.
Tras terminar el suculento desayuno con el que nos deleitó la señora Choi a su esposo y a mí, me dirigí a la habitación para cambiarme de ropa. Abrí el armario y seleccioné una camisa de rayas blancas y azul marino que combinaba con los pantalones de cintura alta que había llevado, pero que no había tenido la oportunidad de vestir hasta aquel día. Más tarde, fui al cuarto de baño, en el cual por medio de una plancha ondulé todo mi cabello y asimismo me maquillé con la ayuda de un eyeliner y un pintalabios color rosa pálido. Me observé en el espejo y concluí que debía vestir así más a menudo. Después de haber terminado, bajé a la primera planta; me despedí de los señores Choi y salí al exterior literalmente corriendo. Llegué a la parada del bus y subí al primero que pasó por allí.
Transcurrieron veinte minutos cuando el vehículo frenó en la parada que Kang Sang Ra debía estar esperándome. Sin embargo, ella no estaba allí. Le envié un whatsapp, pero no hubo ninguna respuesta por su parte. Me cuestioné a mí misma qué podría haber sucedido con ella para que aún no estuviera allí, pero mi mente permaneció en blanco y renuncié a pensar en ello. Preferí sentarme en uno de los bancos cercanos a la parada del autobús y aguardar pacientemente a su llegada. Diez minutos, veinte minutos, media hora… Antes de desistir por completo, intenté una vez más contactar con ella. Marqué su número de teléfono y al segundo me saltó el contestador. Mi inminente enfado se tornó en angustia y desesperación… ¿y si realmente había ocurrido algo grave? ¿un accidente? Respiré hondo y mantuve la calma. Revisé mi lista de contactos y pulsé el número que pertenecía a sus padres. Al momento escuché una voz aterciopelada al otro lado de la línea. Era su madre. Con tono sosegado me informó que Kang Sang Ra no podía venir y a continuación se disculpó muy apesadumbrada. Al rato de terminar la llamada, comencé a barajar la posibilidad de regresar a casa. Kang Sang Ra no iba a venir y yo no conocía muy bien el centro de la ciudad como para aventurarme sola y perderme en una de aquellas estrepitosas calles. Mi cerebro dictaminó que lo más sensato era coger el autobús y evitar futuros arrepentimientos. No obstante, mi corazón impulsivo guio mis movimientos adentrándome así entre la multitud y encerrándome en ella hacia un rumbo desconocido e irreversible para mí...
- Oye, niña problemática, ¿cuándo vas a despertarte? No sé qué voy a hacer contigo. Me traes tantos problemas…
Aquel timbre de voz  con ese matiz de preocupación me producía una descomunal felicidad y tranquilidad. Era una voz que me resultaba familiar y a la que, de alguna manera, echaba en falta en mi vida. Deseaba cumplir su petición y complacerle, pero me turbaba el riesgo de que todo aquello fuera fruto de un sueño; de algo creado por mi propio subconsciente. Entonces, la voz se desvaneció y sentí unos pequeños golpecitos en mi hombro derecho. Era hora de regresar al mundo real…
- Por fin… despiertas, pequeña dormilona. Estaba asustado. Si te hubiese pasado algo grave, no habría sabido qué hacer… ¿cómo se te ocurre salir sola en este estado a la calle? ¿Acaso no valoras tu vida? ¿Y si no llego a encontrarte… qué hubiera sido de ti?- aquel sujeto me abrazó cálidamente. Froté mis ojos para averiguar quién era y acto seguido lo contemplé conmocionada. Para confirmar que todo era tangible y no una simple ilusión, acaricié su cara suavemente.
- Dongwoo… ¿esto es real, verdad?
- ¿Lo dudas? Permíteme enseñarte lo real que es.- se precipitó sobre mí y me besó levemente el labio inferior.- ¿Lo sentiste?
- Claro que lo sentí.- me sonrojé. Era nuestro segundo beso y, al contrario que el anterior, este estuvo cargado de sinceridad y sentimiento.- Pero… ¿qué hago aquí? ¿Cómo me encontraste?
- El destino quiso que sucediese así. Ni yo mismo comprendo cómo fue posible que coincidiésemos nuevamente, pero me alegro de que haya sido así.- mostró una enternecedora sonrisa y me rodeó con sus brazos estrechando su cuerpo junto al mío.
- No… esto no está bien. Tú estás prometido…- lo aparté con las manos de mi lado y bajé de la cama en la que había estado descansando a causa del colapso que había sufrido. Sin embargo, él se aproximó hasta donde yo me hallaba y agarró violentamente mi brazo impidiendo que escapase.  
- Eso ha sido una artimaña de mis padres. Concertaron el matrimonio sin mi consentimiento, pero yo no siento nada por  Lee Ji Ah. Créeme…
- Aunque eso sea cierto, debes seguir el plan que tus padres diseñaron para tu futuro. Ellos buscan lo que mayor beneficio te traiga para que seas feliz. Además, enredarte con una chica como yo supondrá una gran polémica en los medios de comunicación y afectará a tu carrera artística. Lo mejor será detenerlo antes de que se nos vaya de las manos…- fruncí el ceño y me mordí el labio inferior.
No podía imaginar un futuro sin Dongwoo. Desde que lo conocí en aquel taxi, toda mi vida empezó a girar en torno a él. Mis pensamientos, e incluso mis decisiones, estaban influenciados por su existencia. Todo ello dependía de Dongwoo. Si él desapareciese, mi mundo se vendría abajo en cuestión de segundos. A pesar del dolor que conllevaría echarlo de mi corazón, era la decisión correcta que favorecía a ambas partes, en especial a él, a quien le esperaba un futuro prometedor junto a Lee Ji Ah. Yo sólo obstaculizaría esa felicidad. Mientras reflexionada sobre este tema tan delicado y desgarrador para mí, Dongwoo clavó sus profundos ojos en los míos. Daba la impresión de que tenía algo importante que decir. Como tardaba tanto en soltarlo, decidí romper yo misma el hielo.
- ¿Ocurre algo? ¿Qué quieres contarme que te mantiene tan pensativo?
- Eun Sok.- hizo una breve pausa para tomar una bocanada de aire y continuó.- ¿Por qué no me lo dijiste antes?
- Porque estaba aterrorizada. Estaba asustada. Descubrir que el hombre con el que estás viviendo es el manager de INFINITE y , además, que está interesado en ti fue algo que me impactó demasiado…
- Y ahora que conoces sus sentimientos… ¿lo aceptarás?- susurró inquieto y con gran intriga a la vez que se rascaba la cabeza y me miraba de soslayo.
- Y si así fuera… si decidiese darle una oportunidad… ¿abandonarías la idea de estar juntos?
- No.- confesó sin atisbo de duda.- No me daré por vencido. Ahora que conozco mis verdaderos sentimientos, no te dejaré marchar fácilmente.
- Eso ahora mismo da igual. Sólo debes centrarte en Lee Ji Ah…
- Lee Ji Ah, Lee Ji Ah. Helena, déjalo ya. Olvídate del resto del mundo. Pensemos en nosotros mismos por un momento y seamos sinceros. ¿Me amas?
- ¿Por qué eres tan directo?- me oculté la cara con las manos. Era incapaz de fijar la vista en él nuevamente. Estaba muy avergonzada debido a su pregunta.
- Contesta. Sí o no.
- No creo que sea buena idea…- inquirí con voz apagada sin permitir que Dongwoo se percatase de mis ojos llorosos.
- Si vas a rechazarme, al menos mírame a la cara.- tomó mis manos dejando al descubierto mi rostro. No pude contenerme más y empecé a sollozar.- ¡Eh, tranquila! No llores. No hace falta que digas nada más.
Me cogió de la cintura y me aproximó hasta él. Acto seguido, acarició mis pequeños labios y los besó. Ya no había vuelta atrás. Habíamos tomado la decisión de permanecer juntos. Enfrentaríamos cualquier obstáculo, cualquier inconveniente, cualquier comentario con el fin de mantener a flote nuestra relación. Nuestro deseo desataría el comienzo de una larga pesadilla repleta de dolor y tristeza.
- No quiero que te vayas. Quédate conmigo esta noche…


sábado, 15 de junio de 2013

GRUPO DEL MES: 4MINUTE.

¡Adiós condenados exámenes, hola vacaciones de verano! ¿Qué tal habéis estado durante mi larga ausencia, queridos lectores? No es necesario esperar más, pues ya estoy de vuelta para seguir actualizando el blog. Precisamente fue ayer el último día que tuve clases y hoy, por fin, soy libre y podré invertir más tiempo en subir entradas. Y ahora os dejo con el grupo coreano del mes… ¡4Minute! Debo comentar que no está entre mis bandas favoritas de K-pop; no obstante tienen canciones muy pegadizas y llenas de vida. Espero que os guste.



















Pre Debut
CUBE Entertainment anunció en 2009 la creación de un nuevo y fantástico grupo de chicas. Del mismo modo reveló la identidad de dos de los miembros del grupo: Jihyun, la líder del grupo y Hyuna, ex miembro deWonder Girls. El 11 de junio de 2009 se reveló el primer teaser del grupo en el cual las siluetas de los miembros se podían apreciar. 
Debut
El 15 de junio de 2009 fue lanzado su single debut, “Hot Issue” así como los perfiles de las miembros del grupo. Pocas horas después de la liberación de su canción, obtuvo el quinto puesto en varias listas digitales tales como Cyworld, Bugs, Soribaba y Mnet. 4minute realizó su primera presentación en vivo el 18 de junio de 2009 con su single debut "Hot Issue". El grupo promovió la canción desde su lanzamiento hasta el mes de agosto del mismo año.

El grupo cuenta con cinco bellísimas componentes que son las siguientes:

 
JIHYUN (Líder, vocalista y bailarina). http://es.drama.wikia.com/wiki/Nam_Ji_Hyun_(1990)

GAYOON (Vocalista y bailarina).





JIYOON (Vocalista, rapera y bailarina).




HYUNA (Rapera, vocalista y bailarina).




SOHYUN (Maknae, vocalista, rapera y bailarina).


He aquí algunas de las canciones que más me han gustado.





















sábado, 8 de junio de 2013

FANFIC COREANO: SUEÑO INALCANZABLE XII.

Muchos de vosotros me terminaréis odiando por una sencilla razón: la longitud del fanfic. En un comienzo, mi propósito era crear algo rápido y sencillo, pero las ideas no paran de fluir y aparecen nuevas situaciones interesantes que quiero reflejar, así que disculpadme si es demasiado largo. Aquí os dejo el nuevo capítulo que gira en torno a Eun Sok y Helena. Un saludo para todos.

CAPÍTULO 12
Admiré a través de la ventana el radiante sol que aclimataba el cielo ese día, acompañado de algunos esponjosos algodones bautizados bajo el nombre de nubes. Revisé el interior una vez más de mi cartera para confirmar que llevaba todo lo necesario: móvil, monedero, las llaves de casa, un paquete de clínex, un bloc de notas y una pluma que nunca venían nada mal. Todo estaba en orden, por lo que descendí al piso inferior donde Eun Sok me aguardaba con inquietud y agitación. Su expresión se había endurecido y sus ojos parecían más distantes de lo habitual. Estaban nublados y perdidos sin posicionarse en ningún punto fijo, surcando un mar imaginario, en el cual parecían no existir puertos ni superficies en los que pudiera amarrarse con seguridad y determinación. Era un alma ajena a la realidad. Alguien débil y frágil. Esa era la imagen que tenía en mente mientras que él continuaba sumido en sus pensamientos e ideas. Un Eun Sok que no parecía real, un Eun Sok condenado a su propia oscuridad. Repentinamente un escalofrío invadió todo mi cuerpo ante aquella figura que yo misma había trazado y la cual no temía equivocarme en absoluto, pues ya había experimentado ese tipo de comportamiento los primeros días que llegué a aquella casa.
- ¿Qué haces ahí parado? ¿No íbamos a salir? – busqué una forma de abrirme paso entre ese pequeño velo que mantenía a Eun Sok fuera de sus sentidos. Se giró y me miró con dificultad. Desorientado. Después agitó la cabeza y regresó a ser la misma persona seria, educada y agradable de siempre.- ¡Vamos! Que ya es muy tarde y me tienes que enseñar muchos lugares que no conozco.
Cerré el puño y estiré mi insignificante dedo meñique. Eun Sok no comprendía qué estaba tratando de hacer, así que cogí su mano y entrelacé nuestros respectivos dedos meñiques. Él me miró extrañado y yo le respondí con una deslumbrante sonrisa.
- Es una promesa. ¡Si no la cumples te patearé el trasero hasta que se te aplane!
Acto seguido, Eun Sok me deleitó con una de esas sonrisas pícaras que tanto le personalizaban. Estrechamos nuestros dedos con fuerza al mismo tiempo que nuestras miradas, enternecidas por el momento, se cruzaban. Aprovechando la situación, él se acercó a mí y me rodeó con sus musculosos brazos. Fue uno de los abrazos más hermosos que había experimentado en toda mi vida. Sentí cómo su corazón palpitaba a un ritmo vertiginoso, como su cuerpo se agitaba y temblaba, como sus secretos eran revelados a través de sus gestos… Esa coraza que me impedía ver más allá de sus palabras se había destruido.  A continuación, comprendí que esa clase de sensaciones ratificaban el fuerte interés que Eun Sok tenía por mí. De repente, situó su mano en mi nuca y me examinó detenidamente.
- No deseo que te vayas…
- ¿Cómo?- no alcancé a entender que dijo. Me abrazó nuevamente hundiendo sus ojos en mi hombro. Parecía que tenía ganas de llorar, así que intenté ver que le ocurría; sin embargo él no me permitió realizar ningún movimiento. Me retuvo en esa posición durante unos minutos y prosiguió hablando.
- Eres la primera chica que me desestabiliza de esta manera. Intenté evitarte, pero continuabas ahí, en mis pensamientos… Al principio pensé que el choque cultural me había provocado esa curiosidad por conocer más acerca de ti. Pero al poco tiempo capté que no era de dónde venías, sino quién eras. Helena… te has convertido en mi capricho y debilidad y no sé cómo remediar esta enfermedad desenfrenada que siento por ti. Y si te vas, ¿qué haré? Jamás me interesé por nadie hasta que llegaste tú y alteraste mi monótona vida. Yo, un hombre que no se preocupa por nadie más salvo en sí mismo. Este hombre que ves te pide compasión. Helena, ayúdame, busca un antídoto para este sufrimiento que siento…
No supe qué responder. Su confesión sembró incertidumbre en mi mente. Conocía sus sentimientos, pero nunca imaginé escucharlos de sus propios labios. Pretendía transmitirle una respuesta, pero no sabía qué palabras usar para elaborarla. Ya estaba decidida a ello cuando él me interrumpió.
- No digas nada. Sé que fue muy repentino. Tómate tu tiempo para pensarlo, no te presionaré. -  se apartó y me plantó un enternecedor beso en la frente.- Creo que es hora de marcharse. Hoy eres mía y no te dejaré escapar fácilmente.
Tomó mi mano y salimos al garaje para coger el coche. Accedimos al automóvil y nos pusimos en marcha hacia el centro de la capital, Seúl. Durante el viaje, Eun Sok no paró de lanzarme miradas mientras conducía. Todo ello generó en mi organismo numerosos cosquilleos  y gran nerviosismo; por lo que tuve que evitar sus ojos hasta que llegamos a nuestro destino. Una vez allí, nos introducimos en el primer centro comercial que avistamos. Estuvimos admirando los diversos escaparates conformados por magníficas prendas a precios realmente elevados. Sin embargo, todo quedó en un pequeño sabor amargo de boca. Tuve que conformarme con observar aquellos atuendos a través del cristal con expresión afligida. Eun Sok, ubicado a mi izquierda, no tardó en reparar en mis inmensos deseos de conseguir alguno de ellos. Insertó una de sus manos en su bandolera de Tommy Hilfiger y extrajo una hermosa cartera de cuero negro.
- ¿Cuál te gusta? -  formuló a la vez que buscaba su tarjeta de crédito en uno de los compartimentos del billetero.
- ¡Ah! Nada. Sólo estaba mirando.- posicioné mis manos sobre las suyas para que no continuara con lo que había comenzado. No obstante, él apartó mis manos rozando sus dedos con los míos, lo cual constituyó una electrizante sensación cargada de una gran dosis de adrenalina para mi cuerpo que me hizo perder el equilibrio por unos instantes. Eun Sok había alcanzado el mismo efecto que únicamente Dongwoo podía provocar en mi organismo. Repentinamente, emergió un sentimiento de pavor en mi interior. Temía enamorarme de otra persona. Temía olvidarme de Dongwoo, aquel hombre que había enfermado mi corazón de amor. Temía cambiar la relación que Eun Sok y yo habíamos bordado a lo largo de mi estancia en Corea.  Estaba despavorida por las consecuencias que podrían traer mis decisiones. No quería perder nada de lo que había obtenido hasta ahora, pero era algo inevitable a lo que debía enfrentarme tarde o temprano. Mi elección me haría ganar algo y al mismo tiempo perder otra cosa. Finalmente regresé a mis sentidos y puse atención a la conversación que estaba entablando con Eun Sok.
- No finjas. Tienes el gesto de una niña de cuatro años que quiere un caramelo, pero que sus padres no se lo van a comprar.- espetó Eun Sok con un ademán de felicidad.- No te sientas incómoda. Lo hago con mucho gusto. No quiero nada a cambio… Bueno, sí. Deseo que dirijas toda tu atención a mí, ¿te parece bien?
No pude evitar aceptar su propuesta, así que compramos ropa tanto para mí como para él. Evalué y analicé cautelosamente todas aquellas prendas que iban a ser destinadas para mi propio consumo, pues no quería aprovecharme de la generosidad de Eun Sok. Por lo tanto, escogí con precaución y considerando el precio justo sin sobrepasarme. Tras finalizar nuestras compras, Eun Sok y yo nos encaminamos a descansar a un Starbucks. Allí, nos sentamos en una de las mesas. Un camarero se acercó hasta nosotros para tomarnos nota.
- Bienvenidos, ¿qué desean tomar?- preguntó el joven con aura tranquila y amistosa. El muchacho sacó de uno de sus bolsillos una libreta y se preparó para apuntar.
- Yo tomaré un café con leche y un muffin de arándanos.- demandó Eun Sok con seguridad y confianza, algo habitual en él. – Y tú, Helena, ¿qué quieres?
- Creo que pediré uno de estos.- señalé en el menú la bebida que quería mostrándosela al camarero.- Un frapuccino de vainilla.
- ¿Algo más?- insistió el joven antes de marcharse. Negué con la cabeza.- Perfecto. Esperen unos minutos. Ahora mismo traeré su pedido.
Al cabo de unos minutos, el muchacho estaba de vuelta con nuestras bebidas y el muffin de arándanos. Lo trajo y lo dispuso en la mesa con destreza. Después nos deseo buen provecho y se alejó con el objetivo de atender a nuevos clientes que se habían aglomerado a la entrada del local. Cogí mi frapuccino y lo degusté. Tenía un sabor espectacular, una textura esponjosa y agradable, una fragancia dulce...Todo ello unido te hacía sentir cómodo y confortable. Volví a absorber un poco más de aquel glorioso líquido y acto seguido miré a Eun Sok. Estaba embobado, con sus ojos puestos en mí, revelando una pequeña sonrisa que me permitía apreciar sus elegantes y relucientes dientes. Traté de esquivar sus miradas, pero resultó imposible.
- ¿Por qué me miras tanto? Me vas a desgastar.- bromeé mientras removía mi bebida con una pequeña cuchara de plástico. Él se incorporó y apoyó los codos en la mesa entrelazando así sus manos, en las cuales acomodó su delicada barbilla recién afeitada. Sus rasgos faciales se fortalecieron y espontáneamente cerró sus ojos. Posiblemente mi pregunta le había parecido algo estúpida. Incluso yo lo pensaba. Sin embargo, él se mostró relajado y no se alteró. Abrió de nuevo sus ojos y contestó mi cuestión.
- No creo que sea necesario una respuesta. Únicamente mírate en un espejo y te responderás a tu propia pregunta.- estiró sus brazos y agarró mis manos. Las aproximó hasta su semblante y las situó a pocos centímetros de sus gruesos labios. Noté cómo su respiración chocaba contra mis delgadas falanges. Rocé sus carnosos labios que se encontraban secos y agrietados. Sentía un fuerte impulso de humedecerlos, por lo que interné mi dedo índice en su boca. Una vez en su interior, contacté con su lengua. Esa lengua áspera que incitaba al sexo femenino al deseo sexual. Empezó a lamerme y mi dedo rápidamente se impregnó de la saliva de Eun Sok. Tras ello, retiré mi dedo y rocié sus labios con aquel viscoso líquido segregado en el interior de su boca. Mi cuerpo actuaba instintivamente, no podía detenerme y a Eun Sok parecía satisfacerle la situación. De manera abrupta, me alejé y concentré mi vista en el suelo. Estaba avergonzaba por lo que había ocurrido. No tenía la fuerza suficiente como para mirarlo a los ojos. “¿Qué acabo de hacer? ¿Estoy loca?”: me recriminaba a mí misma. Eun Sok no articuló tampoco palabra hasta que nos fuimos del Starbucks. A la salida del local, Eun Sok sugirió ir a un fotomatón. Acepté su petición y entramos en uno de ellos. Minutos después, teníamos las pequeñas fotos impresas bajo nuestra posesión. Acordamos llevar al menos una de las fotos en la cartera para no olvidarnos nunca el uno del otro cuando yo regresara a España; y cada uno seleccionó la que más le había gustado. Terminado el día, pusimos rumbo a casa de los señores Choi. Había sido un día un tanto extraño, pero a la vez divertido y gratificante.















domingo, 24 de febrero de 2013

FANFIC COREANO: SUEÑO INALCANZABLE XI.


Pido perdón a todos los lectores por mi tardanza, los  estudios me quitan mucho tiempo libre y a todo ello se suma la época de exámenes por la que estoy atravesando en estos precisos momentos; pero prometo regresar pronto. Y ahora aquí el nuevo capítulo. Disfrutadlo.
Un fuerte vínculo comienza a emerger entre Eun Sok y Helena. ¿Será tan fuerte esta unión como para cambiar los sentimientos de la protagonista hacia Dongwoo?  

CAPÍTULO 11
Regresé a casa apenada y me encerré en mi cuarto. Aplasté mi cara contra la almohada de la cama y comencé a derramar lágrimas. Nunca me había sentido de esa manera ni siquiera cuando puse fin a la relación con mi anterior novio. Dongwoo ya pertenecía a otra persona… Lo mejor era alejarme cuanto antes y no volverlo a ver  jamás. La almohada comenzó a humedecerse y a mancharse por culpa del rímel y el eyeliner que había utilizado para maquillarme los ojos.  La cogí y atravesé el pasillo hasta el lavabo donde comencé a restregar las manchas con el primer jabón que encontré, pero lo estaba empeorando muchísimo más. Ahora el rastro de rímel se había dispersado por todo el cojín como si de un borrón se tratase. Tras ello, bajé a la cocina en busca de algo que pudiese ayudarme; sin embargo no entendía mucho sobre utensilios de limpieza ni nada que pudiese eliminar manchas. De repente la cerradura de la puerta principal comenzó a girarse. Alguien pretendía entrar en casa. Seguramente sería Eun Sok sin duda alguna (la posibilidad de que fuese un ladrón fue descartada al instante, puesto que el barrio de los señores Choi era una zona de seguridad extrema repleta de guardias por todas partes). Me fijé en el reloj de la cocina, el cual marcaba las cuatro de la mañana. “¿Qué debería hacer ante tal situación?”: pensaba agitadamente. Subir a la segunda planta era algo imposible y muy arriesgado, así que me escondí en un recoveco de la cocina con el almohadón entre los brazos. Me estaba volviendo una experta en esto de las escondidas. La puerta se abrió lentamente que casi no pude escucharla y Eun Sok entró al salón. Encendió la luz y se echó en el sofá soltando un largo y profundo suspiro. Pasaron unos minutos y Eun Sok permanecía inmóvil, así que salí de mi escondrijo y me acerqué hasta el sillón lentamente. Efectivamente, estaba dormido. Me quedé mirando sus relajadas facciones, su pequeña nariz y esos hermosos labios que tentaban a cualquiera. Sitúe mi mano en el aire a pocos metros de sus mejillas, deseaba deslizar mis finos dedos por toda su tersa y brillante tez libre de impurezas. Su cabello alborotado le daba un toque de chico malo. Coloqué mi dedo en su entrecejo y recorrí todos los poros de su piel hasta la punta de la nariz.
- Es tan suave y cálida…-  murmuré.
- ¿Y por qué no la pruebas? – me cogió de aquella mano pecadora que había cometido el delito de rozarse con su cara y me dio un tirón hacia él. Caí repentinamente al sofá y Eun Sok se dispuso encima de mí agarrándome fuertemente las manos para no dejarme escapar.   
- ¿Perdón? - musité sorprendida. Esa reacción no era propia de él.
- Se te veía muy contenta y emocionada y pensé que tal vez querrías degustarme a ver sí soy de tu agrado o no.- comentó Eun Sok con voz pícara y juguetona. Aproximó su cara hacia la mía y repentinamente enrojecí. Nuestros pulsos comenzaron a acelerarse de tal manera que ambos pudimos captarlo; a pesar de ello él continuó encima mía sin inmutarse de las alteraciones que nuestros cuerpos habían comenzado a sufrir. Mas yo no deseaba seguir en esa postura tan incómoda y provocativa.
Elevó su dedo, lo posicionó en mis labios agrietados y a continuación me liberó de sus garras como si de una débil presa se tratara.
- ¿Te ha gustado o qué? Mis padres me han dicho que tengo futuro en el mundo del cine. – soltó de golpe como si no hubiera ocurrido nada.
- ¿Cómo? – estaba consternada y taciturna, pues no entendía que pretendía decir con aquellas palabras.
- No te habrás pensado qué te iba a hacer algo, ¿o sí? No soy ese tipo de hombres que se aprovechan de las mujeres cuando se encuentran en situación de debilidad emocional. – manifestó señalando el almohadón cubierto de lágrimas, prueba de mi lamentable estado. – Posiblemente ahora mismo no te apetezca hablar ni recibir consejos de nadie, así que lo mejor es que te vayas a dormir. Intenta descansar y no pensar en aquello que te causó tanto dolor hoy.
Me extendió su mano para ayudar a levantarme del sillón. Tras ello, acarició mi desastroso cabello, me entregó un cojín, puesto que mi almohada estaba manchada y se largó de la sala murmurando algo que no alcancé a escuchar.
Corrí hacia mi cuarto muerta de vergüenza y me metí en la cama. Caí al momento en un sueño profundo; sin embargo aquellas pesadillas que habían desaparecido provisionalmente volvieron a las andadas. Mi fastidioso y sexy chico repelente regresaba a mortificarme nuevamente y aunque sonase masoquista, era algo que me agradaba, pues si en la realidad no podía tenerlo, al menos en mi consciente conseguía apoderarme de él por unos minutos, después se largaba y no volvía a verlo jamás.
Ya era martes. Me quedaba sólo medio mes para regresar a mi país de origen. El tiempo transcurría velozmente y eso hacía que me deprimiera en muchas ocasiones del día. Ese mismo día y por alguna extraña razón, Eun Sok me trajo el desayuno a la cama en una bandeja: una taza de chocolate caliente, un par de tostadas con mermelada de arándanos y una rodaja de sandía recién comprada. Estaba delicioso todo. Terminé de comer ese suculento manjar y bajé al piso inferior, donde haría los deberes de la academia que me habían mandado hace una semana y que yo no me había molestado en hacer hasta ese día. Me senté en la mesa del salón y saqué los libros que necesitaba. Mi escritura había mejorado considerablemente desde que había llegado a Corea al igual que mi pronunciación y mi capacidad de entender a los nativos de dicho país; por lo que la tarea no me resultó difícil de llevar a cabo. Tras media hora conseguí finalizar los ejercicios y me dispuse a pasar aquella tarde viendo la televisión a causa de la indisposición de Kang Sang Ra, quien deseaba invertir esa tarde junto a sus tíos y primos que habían ido de visita. Encendí el televisor. Sin embargo, no había ningún programa ni siquiera drama que captara mi atención en lo más mínimo. Transcurrieron aproximadamente unos quince minutos, cuando reconocí la robusta figura de Eun Sok deambulando por la cocina.
-  ¿Qué estás buscando? – pregunté con gran interés sin echar la vista atrás.
- ¿Eh? – podía imaginarme su reacción de sobresalto sin siquiera mirarle.- ¿Cómo supiste que estaba aquí?
- Qué decir. El ambiente ha sido alterado por la entrada de un flujo de energía que sólo podía pertenecerte a ti.- confesé en castellano y lo observé desde el sofá.
Eun Sok me miró extrañado y confundido, pues no conseguía descifrar lo que había dicho.
-  Mi instinto. Él me dijo que un intruso estaba merodeando por la cocina en busca de algo.- rectifiqué en coreano y escogiendo las palabras adecuadas.- Dejando de lado mis poderes… ¿qué haces aquí? ¿Hoy no trabajas?
- Estaba pensando que tal vez… no, no creo que sea buena idea.- chirrió sus dientes con nerviosismo y apartó la vista. Ese comportamiento no encajaba con su actitud habitual de hombre serio incapaz de dudar de nada. Decidí guardar silencio hasta que él reanudó la conversación. - ¿Te gustaría salir conmigo a dar una vuelta? No es una cita, ni nada por el estilo. Claro que si no quieres no pasa nada, lo entenderé perfectamente. No quiero coaccionarte ni obligarte a algo que no deseas ha-
-  Me parece una idea genial. ¿Adónde iremos?
- ¡Dónde te apetezca!- gritó entusiasmado. Estaba comenzando a descubrir una nueva faceta de Eun Sok.